Pistachos ibiltaris en el programa de la ETB1, Azpimarra. El contenido está en euskara.
El jueves 16 de abril, acudimos varios integrantes de la plataforma «Ibilbideak» a la EITB, concretamente al programa «Azpimarra» para hablar sobre el impacto del deporte en el medio ambiente. Un tema importante, que al menos merece una pequeña reflexión.
Invitados por el programa de la ETB1, presentado por Maddalen Iriarte y Asier Odriozola, acudimos Mikel Bringas, Gestor de Deportes del Gobierno Vasco, Gontxa Torre, Técnico de Medio Ambiente y yo, Ciclista-Bloguero.
Aportamos distintos puntos de vista sobre el impacto real del deporte en el medio ambiente, centrándonos más en el ciclismo de montaña.
Gontzal, como profesional del tema, entre otras muchas cosas, expuso el impacto real que tiene la organización de un evento deportivo, los residuos que se generan, etc. Me hizo reflexionar profundamente sobre pequeñas cosas que nunca las hubiese considerado perjudiciales para el medio ambiente, como el hecho de tirar las cáscaras o peladuras de la fruta.
Se trata de algo que siempre hemos hecho, pero que realmente, puede convertirse en un problema real, ya que la naturaleza no «recicla» tan rápido, como se generan esos residuos, por muy orgánicos que sean, convirtiendo ciertas zonas en auténticos vertederos.
De ahí que su consejo es que todo lo que generemos ha de volver con nosotros, para poder gestionar correctamente su reciclado.
Mi función en esa entrevista, fue la de aportar el punto de vista del ciclista, concretamente, el que se vive en multitudinarias marchas o pruebas deportivas.
Es cierto que cada vez somos más los que disfrutamos de los enormes beneficios que aporta el ciclismo de montaña, pero cuanta más gente, mayor diversidad moral.
Con esto quiero decir, que no todo el mundo tenemos el mismo nivel de conciencia, por lo que mientras algunos hacemos malabares para volver a guardar el envoltorio del gel o la barrita en el bolsillo del maillot, otros no tienen ningún tipo de reparo en tirar el paquete en cualquier lado.
Me acuerdo de una imagen que me impactó bastante en mi primera Orbea Monegros, y fue la de la gente cogiendo en marcha vasos de bebida isotónica y tirándolos unos metros más adelante contra un poste, el cual se había convertido en un basurero improvisado.
Claro está que después la organización eso lo deja recogido y sin restos de basura, pero alguien que hace eso, estoy bastante seguro que no tiene muchos reparos en tirar en cualquier otro lado los restos de algo que ya no le sirve.
Me parece terrible que dentro de las normas que nos suelen recordar antes de iniciar una marcha o prueba BTT, una sea la de no tirar basura. Eso no debería hacer falta ni decirlo.
Nada justifica el no dedicar un par de segundos a recoger o guardar correctamente la basura que generamos mientras disfrutamos de nuestra pasión, el ciclismo de montaña.
Sea cual sea nuestra pasión, tenemos la obligación de velar por el medio ambiente
Recuerdo hace años, cuando me dedicaba más intensamente al Surf, una crítica que se hizo a este respecto, ya que la gente abría la parafina y tiraba el plástico ahí mismo. Terrible!!
Estas cosas son echar piedras sobe nuestro tejado. No solo porque pueden retirar los permisos para andar por ciertas zonas protegidas, sino porque si contaminamos el mismo entorno al que vamos a disfrutar…¿No es una incoherencia?…¿Que estamos enseñando a las generaciones que vienen detrás?.
Dentro de este tema, también tratamos el tema de los senderos. Debemos seguir las rutas habilitadas para ello y no crear nuevos caminos, ya que el daño medioambiental es terrible!
La palabra más adecuada para definir una marcha de bicicleta de montaña, es Atila. Por donde pasaba el caballo del rey de los hunos, no volvía a crecer la hierba. No porque pisara fuerte, sino por el enorme ejército que le seguía.
Hemos de tener en cuenta que la creación de nuevos senderos no hace más que deteriorar la flora y desplazar a la fauna. De esta manera lo que se consigue es que las autoridades pertinentes no den permisos de paso para ciertas pruebas, como paso en la Euskadi Extrem de hace dos años, donde hubo zonas que por las se vieron obligados por ley a pasar andando, ya que no se consiguieron los permisos para ciclar por ellas.
El impacto medioambiental es la razón por la que el número de participantes esté limitado a 500-600 en Parque Naturales y otras zonas protegidas.
Es de aplaudir iniciativas como la de los organizadores de la Eusko Bike Challenge, donde han creado unas fórmulas para minimizar ese impacto:
- Las marcas colgantes, en vez de ser de plástico, serán de papel reciclado y biodegradable.
- Las señales que se irán en las piedras o en las zonas que lo crean necesario, en lugar de hacerlas con pintura duradera, las harán con tiza, de manera que la propia lluvia las ira borrando.
- Una cosa que me gustó mucho desde la primera edición, es la figura de la «bici-escoba». Un chaval de la organización que se encarga de ir barriendo tanto rezagados cómo la basura que vamos dejando detrás nuestro.
Mientras esperábamos nuestro turno, aproveché para grabar un plató desde dentro.
Cuando estéis haciendo vuestra próxima salida en bici, disfrutando de un entorno increíble, en el cual olvidáis todas las miserias del día a día…recordad que está en vuestras manos el que siga así.
¿Qué opinas sobre el impacto que tiene el ciclismo de montaña en el medio ambiente?
Aurelio
Buen reportaje Raúl. Del programa no puedo decir nada porque mi no entender 🙁
En mis tiempos mozos las marchas no eran competitivas y normalmente las organizaban clubs ciclistas. Se sacaban unas perrillas para mantener los gastos del club y poco más. Ahora la mayoría de las marchas son organizadas por empresas privadas, y está claro que quién monta una empresa es para ganar dinero. De lo recaudado cuanto reinvierten en el mantenimiento y limpieza del recorrido?
Como bien dices la diversidad moral en marchas multitudinarias es muy amplia y concienciar al 100% es una tarea complicadísima, por no decir imposible.
La propia administración creo que debería controlar el buen hacer de estas empresas y si es necesario sancionar las malas prácticas… no retirada de carteles, limpieza del recorrido, etc.
Pero bueno, es mi humilde opinión.
pedalesyzapatillas
Gracias Aurelio,
es importante para mí la aprovación de gente de relevancia y referencia como tú.
En ciertas ocasiones, cuando escribes sobre ciertas cosas, denunciando prácticas que se han convertido en habituales, uno pierde la perspectiva, teniendo la sensación de haberme convertido en el "abuelo cascarrabias" 😉
Es una pena que por el afán recaudatorio, se masifiquen las pruebas, con el consecuente deterioro del medio ambiente.
Prefiero quedarme fuera de una prueba, que se mantiene fiel respecto al máximo de participantes, que acudir a una con tal masificación que el estres del entorno natural (y propio…) sea brutal.
Cómo bien dices, es mi humilde opinión.