Parece mentira que ya haya pasado un año, pero ya estamos en noviembre, y con ello llega el final de la temporada de marchas BTT. Aunque las ganas siguen ahí, el cuerpo pide un poco de descanso, el tiempo se vuelve desapacible, pero no damos por cerrada la temporada sin acudir a la llamada de la gente de San Román de Campezo, ya que organizan la marcha BTT más multitudinaria de Álava. No en vano se nos abre a los ciclistas de montaña la posibilidad de disfrutar del Parque Natural de Izki en lo que suele ser una gran fiesta del BTT, a la que acudimos haga sol, lluvia, viento o nieve. Para muestra, la edición 2012, a la cual acudimos pese a la gran nevada con la que nos sorprendió aquella mañana fría de domingo, pero aún así, el día de BTT fue inolvidable: XX marcha BTT San Román de Campezo.
Este año, todos los que íbamos a acudir a la cita del 26 de octubre, estábamos pegados a las previsiones meteorológicas, ya que después de varios días de buen tiempo, el miércoles…comenzó a llover.
Los más optimistas acertaron. Las lluvias cesaron el sábado por la mañana y, como no había caído mucho, jugaron en nuestro favor, ayudando a compactar un terreno bastante suelto por el tiempo tan cálido que habíamos tenido hasta entonces. A todo esto, le sumamos un día totalmente despejado de domingo, haciendo el coctel perfecto para un día inolvidable!
En esta ocasión, mi compañero de ruta sería David, un incondicional de este blog, y a quién conocí personalmente en la II marcha BTT Mercedes Benz. También rodamos juntos en la X marcha BTT de Alegría-Dulantzi, por lo que ya conocíamos cada uno el nivel que teníamos. De esta manera sincronizamos el ritmo de carrera rápidamente.
Yo me suelo mover en autocaravana, así puedo llevar la bici dentro sin problemas, cambiarme tranquilamente, y como es pequeña, no es difícil de manejar ni aparcar. Aún así, en previsión de la gran cantidad de vehículos que se acercarían a San Román de Campezo, aparqué en Urturi, desde donde, junto a David, nos acercamos pedaleando hasta el lugar de la marcha. 7 km extra que nos vinieron bien para desentumecer los músculos y precalentar.
Una vez allí, nos juntamos con el resto de componentes del CDC Virgen de Aiala-Dulantzi que también decidieron disfrutar del placer de rodar por ese paraíso para la Mountain Bike.
Las inscripciones las realizamos online y las 400 se agotaron una semana antes del evento. Aún así, se hizo un cálculo estimado de 200 bikers extra, los cuales corrieron anónimamente, pero…es difícil resistirse a esta clásica del panorama MTB.
Con nuestras pulseras identificativas bien colocadas, tomamos la salida en lo que sería una riada multicolor de riders. El comentario posterior de la organización fue que solamente por ver tanta gente ciclando a la vez por aquellas calles, hacía que mereciese la pena el esfuerzo de preparar la marcha.
El circuito, que hacía una especie de 8, constaba de dos partes, una primera más sencilla de 26 km, que sería “la corta” y una segunda de 25 km y una dificultad técnica mayor, que junto a la primera conformaban “la larga”, sumando un desnivel positivo de casi 1300 m. De todas maneras, como se pasaba por el pueblo al finalizar la primera, se podía decidir si seguir o quedarse para disfrutar del avituallamiento prematuramente.
Para que la marcha no se demorase demasiado, el tiempo de corte para cerrar el paso a la segunda parte de la marcha, fue puesto a las 11:30, lo que nos dejaba dos horas para cubrir los 26 primeros kilómetros, donde la mayor dificultad técnica radicaba en la cantidad de gente que circulábamos por allí.
El tramo final de esta primera parte culminaba con una fuerte subida y posteriormente un rápido descenso, el cual nos dejaba directamente en el avituallamiento, donde pudimos coger fuerzas y reorganizarnos.
Llegamos con más de 20 minutos de sobra al punto de corte, lo cual sorprendió a David, el cual no está habituado a participar en marchas de este tipo, y pudo comprobar que se rueda muy por encima de lo que solemos hacer habitualmente, siendo por ello, una práctica muy recomendable si se quiere entrenar en serio y mejorar el rendimiento. Aunque queramos negarlo, cuando rodamos con los amigos habitualmente, no nos esforzamos todo lo que podríamos, por lo tanto, no llegamos a conocer nuestros límites, ni aumentarlos.
Volviendo a la marcha (tiendo a divagar y perderme en la retórica), después de un corto avituallamiento, pusimos rumbo a “La Muela de San Román”, un peñasco que corona la zona. La subida fue tediosa y dura, sobre todo por el lento peregrinar de la multitud que circulábamos por el mismo paraje, pero el buen ambiente y las bromas amenizaron el ascenso.
Una vez arriba, vino la parte que más nos suele gustar a los bikers: el descenso. Se trata de una bajada un tanto peligrosa, porque es muy pendiente, hay que zigzaguear entre árboles y cuesta mucho frenar. Aún así, disfrutamos de lo lindo. Yo la conocía de la Eusko Bike Challenge Non Stop 2013, ya que bajamos por esa misma zona, por lo que fui más seguro de mi mismo y de la bici.
Después de un subir y bajar continuo por senderos, pistas y roderas, llegamos a lo que sería “la gran subida”. Una pendiente bastante fuerte, la cual nos hizo descabalgar. Realmente podríamos haberlo intentado…pero valoramos que era gastar energías en balde, e incluso que llegaríamos antes andando que montados. Finalmente llegamos al famoso paso de piedra que aparece en el cartel de la marcha, similar al que catalogamos como “El paso de Rohan” en el alto de Gereñu (trazado Vasco-Navarro).
A partir de ahí, bajada y poco más hasta llegar nuevamente al mismo punto del que habíamos partido inicialmente.
Nos acercamos a recoger el riquísimo bocata de tortilla con chorizo, el regalo conmemorativo (un bolso multiusos) y ver si habíamos sido agraciados en el sorteo, donde a David le tocó una botella de vino rioja. Zorionak David!!!
He de decir que tanto la organización como el marcaje fueron impecables. Muy acertada la idea de colgar cintas naranja fosforito, ya que destacan lo suficiente como para poder verlas desde la distancia y saber con antelación hacia dónde dirigirse.
El punto negativo, y es algo que no se puede controlar, lo pusieron los de siempre. Participantes que olvidan donde están, en una marcha popular muy multitudinaria, y circulan como si fuesen solos, creando ocasiones de peligro para el resto. Por suerte no hubo que lamentar ningún accidente grave y todo el mundo pudo disfrutar de esta marcha imprescindible en la agenda de todo amante de la bicicleta y el entorno natural.
Quisiera agradecer a la organización el esfuerzo que realizan año tras año para regalarnos un día tan increíble a los aficionados del Ciclismo de Montaña.
No quisiera terminar esta crónica sin felicitar a David por la gran marcha que realizó, al resto de compañeros del Club Ciclista Virgen de Aiala-Dulantzi, por su compañerismo y como no, a los incondicionales chicos de Pro Evasion Bike, quienes siempre tienen unas palabras de ánimo y muy buen rollito para todo aquel que decida compartir camino y aventura con ellos.
Quienes queráis realizar esta ruta, podéis descargarla aquí:
Larga:
Corta:
Las fotos de la marcha podéis descargarlas haciendo click AQUÍ.
¿Has participado en esta marcha? ¿Que te ha parecido?
Alberto Ibilbideak
Muy buen artículo Raúl!
Ibilbideak
Horrela jarraitu ezkero egutegi osoa beteko duzu! Zorionak kemen hori izateagatik. Gora ibiltari nekaezinak!
pedalesyzapatillas
Mila esker bioi! el calendario entero no…pero casi todo si…jaja. A ver si el tiempo lo permite y cerramos el calendario 2013 con la de Elvillar (Sierra Cantabria).
Cualquier cosa con tal de escapar de nuestro gran enemigo "el sofá"!!
David
Hola Raúl,
Gran artículo sobre la XXI Marcha Btt San Román de Campezo. Fue un placer poder compartir la marcha contigo, espero que disfrutaras del día. Agradecer a la organización su trabajo que fue de 10. Es impresionante la capacidad de convocatoria que tiene la Marcha Btt San Román, ver tanta gente, tanto colorido por las calles del pueblo fue lo que más me llamo la atención.
Espero que podamos volver a vernos en la otra marcha. Muchas gracias por tu paciencia y por dejarme participar.
Saludos
pedalesyzapatillas
David, gracias a tí por el día tan agradable que me ofreciste! Fuiste un compañero increible, no solo por tu conocimiento de la zona (mejor que un gps!!) sino por todos los agradables momentos previos, durante y posteriores a la marcha. Fue todo un placer compartirla contigo, y se que no va a ser la última.
Estoy seguro que vamos a compartir grupeta en muchas y más duras ocasiones!! así que sigue entrenando por el Ioar…y hasta ahi puedo leer 😉